Más que nada de un día para el otro. Muchas cositas para poner en orden. Mucho archivo que borrar. Mucho papel que mandar a la picadora. Este muchacho no es de trinchera. Si Moreno se atrincherara en el INDEC hoy se hablaría de su actitud y no de las causas. Hasta lo veríamos coherente que lo hiciera, tan pintado por los medios. Pero Redrado es un pie tierno. No está en terreno conocido. Estas noches le deben resultar complicadas. Por suerte ya pudo sacar un montón de cajas del Banco, con papeles y vaya a saber cuantas cosas más. Tal vez muchas no debería haberlas sacado del Sacro Sanctorum. Este muchacho necesitó tiempo. Se lo consiguieron los mierditas.
viernes, 8 de enero de 2010
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