viernes, 30 de abril de 2010

35 AÑOS DE LA CAÍDA DE SAIGÓN


La vida y el napalm


Todo el sufrimiento del pueblo vietnamita representado en esta madre y un racimo de hijos aterrorizados al paso de las tropas norteamericanas en aldeas de mil años de existencia y en este pibe llorando a su madre muerta.



1975, los tanques llegan a Saigón con un pueblo detrás


Ho Chi Minh, 1961, ya el imperio francés había quedado atrás. Ahora estaban los norteamericanos. desde los '50 la embajada de EEUU en Saigón se colmaba de asesores en salud y agricultura, como Dan Mitrione en la de Montevideo, agregados a la embajada. Tío Ho, aquí en el río Lijang, en China, comenzando el largo camino para derrotar al Tío Sam. Nada menos que por eso merece el respeto de la Historia. Padre del Vietnam, la demostración que un hombre puede hacer la diferencia si su pueblo le cree y lo sigue.


Festejos a lo grande en Vietnam. Representación de la caída de Saigón con tanquistas ya nacidos en un Vietnam soberano.


Horas antes de la caída. Embajada de EEUU en Saigón. Pánico y desesperación para subirse a los últimos helicópteros que los llevarán a los portaaviones. El fin de la invasión norteamericana en Vietnam.


Parecería que las imágenes de las huídas en helicóptero son el paisaje de los puntos de inflexión, para bien o para mal, de la historia de los países.

Discurso de la Presidenta Cristina Fernández honrando al pueblo vietnamita en la Sesión Solemne por el Bicentenario de Venezuela a días de la reunión con el Jefe de Gobierno N´guyen Tan Dung.



"Hace poco, el día viernes, estuvo visitándonos en la República Argentina el Primer Ministro de la República Socialista de Vietnam.

Nosotros cumplimos 200 años y él me decía que Hanoi cumple este año 1.000 años, mil años. Mil años en los que pasaron las principales potencias del mundo ocupando su territorio. La última, la más importante de la última centuria.

Y fíjense ustedes, con mucho poderío militar, en Vietnam se tiraron el doble de bombas que durante toda la Segunda Guerra Mundial y, sin embargo, ese pequeño gran pueblo, pudo vencer durante siglos a tantísimas ocupaciones. 


Y conversando con él, porque claro, cuando sucedía Vietnam yo era una estudiante, era muy joven, pero era un icono, como era también la Revolución Cubana, un icono de nuestras juventudes. Entonces así charlando con él en un momento hablaba de la ofensiva de allá del año nuevo Tet del '68, y entonces él me dice: "Mire, esta herida -y me muestra una pequeña cicatriz, porque fue un combatiente de los 12 años- me la hicieron durante la ofensiva del Tet". Y yo pensaba: pensar que nosotros a nuestros libertadores los miramos desde una estatua o desde un cuadro; ellos los siguen mirando, los están gobernando y los pueden ver todavía recorriendo las calles.

Pero lo importante, y me parece que es lo que une toda la historia completa aquí y en el mundo, es que no hay poderío militar, no hay poderío económico que pueda con la decisión de un pueblo cuando este decide liberarse. 

Y yo creo, para terminar, que este es el mensaje que nos dan esos hombres y esas mujeres que enfrentaron al ejército más poderosos en aquel momento, en 1810, el mensaje es que lo que define la libertad de los pueblos, la construcción de nuestras sociedades, es el valor y el coraje que tengan sus ciudadanos para defender los sagrados derechos de la libertad y de la igualdad. "

Presidenta Cristina Fernández, Caracas, 19 de Abril de 2010

2 comentarios:

El Grito Primal dijo...

Sabés, el primer libro que leí en mi vida, a los 9 años fue Adios a Saigón de Jean Larteguy y al ver a nuestra Presidenta honrando al Presidente de Vietnan te juro que me llenó de orgullo.

Che Genetic dijo...

Y ese libro de Lartéguy es uno de sus pocos libros que me quedan por leer.

Discutido en Francia, Lartéguy es a muchos franceses como si acá un ex comando del ejército hubiese escrito libros sobre los carapintadas más menos varios matices, algunos de importancia.

Pero al despojarte de ese prejuicio, sabiendo de que se trata, la data de sus relatos es necesaria cuando querés incorporar elementos en el estudio de la historia de Vietnam. Una mirada de tantas otras que se requieren.

Lo mismo que "Un americano tranquilo" de Graham Green.

A mí me pasó lo mismo con el discurso. Estudio a Vietnam desde los 14 años. Verla y oírla hablar del tema me juntó pasiones.