domingo, 22 de agosto de 2010

¿QUÉ ES UN CATALÁN?

Corre por mis venas un 50% de sangre catalana. Debo se más catalán que muchos hijos de aragoneses nacidos en Cataluña que claman por la independencia de España. Hay también nacidos de padres valencianos, sevillanos y de todas las comunidades de España que emigraron a una Cataluña que desde el Estado Español, por hache o por be, siempre fue más beneficiada que el resto de las comunidades. ¿Qué es un catalán? ¿Nacidos desde cuántas generaciones de catalanes?
Hoy en La Vanguardia, el principal diario de Cataluña, hay una encuesta con un resultado interesante.
El diario les pregunta a los lectores si están de acuerdo con la expulsión de los gitanos rumanos de Francia, los primeros culpados de una inseguridad que como crecerá por la crisis tendrá nuevos culpables, siempre de piel más oscura que el galo medio normal, siendo que los culpables de la crisis que genera inseguridad siguen en sus puestos públicos y privados.
Se nota que es muy jodido ser rumano en Cataluña. Habrá que ser catalán nomás. Pero ¿Qué es un catalán? ¿Con hablar su idioma alcanza? ¿O aparte es mejor ser tirando a rubión?
Un día alguien me dijo: "Los catalanes son alemanes sin plata"
Viendo el resultado de la encuesta y el hecho que La Vanguardia la proponga a sus lectores, Cataluña tiene un idioma con grandes vínculos con el idioma francés, el que se usa para los documentos de expulsión de los gitanos y no pierde nada de eso alemán que me contaron, se nota que recogieron lo mejor de Europa.

2 comentarios:

Billii dijo...

lo inentendible de la medida de echar a los gitanos es que los franceses no se planteen lo anticuado y violento de su posición. la diferencia, no pequeña, entre deportar al enemigo y matarlo a palos, hambre y cámara de gas, habla de los mucho que el hombre avanzó en la solución de sus problemas. eso si, el problema para "ellos" sigue siendo el mismo. una ley de arizona que se parece a una ley francesa... me da que pensar.

Che Genetic dijo...

Sí, es obsceno, fijate que es impensable que Francia lo haga con los judíos, cosa que sí hizo hace sólo 65 años atrás. La diferencia es que los judíos trabajaron en la memoria y tuvieron los medios para fijarla en películas, series, documentales, libros, informes televisivos y a partir de ser un estado la creación de memoriales y monumentos. Los gitanos, que la ligaron parejo, no tuvieron en estos 65 años la atención de Occidente para contar sus horrores.

Entonces no es tan dramático expulsar gitanos en Francia, porque es cultural culparlos por los robos, también para los franceses.

En mi infancia de Flores dos cosas había que temer: al hombre de la bolsa y a las gitanas porque robaban pibes. Así, haciéndonos culturalmente fachistas se fue creciendo en Occidente.