lunes, 20 de junio de 2011

Masacre de Tavannes: La muerte llegó en mula - Verdún, 1916

El frente de Verdún en la Primera Guerra Mundial, como en el de la Somme que sucedía simultáneamente, era un gran devorador de carne humana. Un alto mando cuyos generales de la aristocracia mandaban al frente a soldados de la clase obrera con las tácticas del siglo XIX enquistadas a pesar del invento de las ametralladoras y el alambre de púa defensivo.

Era tal el consumo, que en la retaguardia se usaban túneles ferroviarios para cobijar tropas de refresco. Uno de ellos, el de Tavanne de 1.200 metros, de la línea SNCF Verdún-Metz, estaba colmado por literas de 3 pisos con una sola canilla de agua, sin baños y sin ventilación. Las condiciones sanitarias eran pésimas, pero en definitiva eran ganado al matadero y las condiciones en las trincheras del frente eran infinitamente peores.

Además de resguardar a las tropas de los obuses alemanes, el túnel albergaba gran cantidad de municiones y explosivos. El 4 de septiembre de 1916, una mula de las que se utilizaban para el transporte de municiones entró en pánico al sentir su carga incendiada por causas nunca explicadas. En su carrera entró al túnel inflamando el combustible del grupo generador. 

 
De más de 500 soldados de los regimientos de infantería 18º, 24º, 367º y 369º y el 4º de Ingenieros sólo dos sobrevivieron. Los soldados de la otra mitad del túnel buscaron despejar la otra salida bloqueada por la proximidad del frente, más la artillería alemana comenzó un bombardeo feroz sobre las dos bocas del túnel impidiendo no sólo la salida sino cualquier intento de rescate desde el exterior.

El túnel de Tavanne siguió cobrándose vidas durante la Segunda Guerra Mundial. En diciembre de 1944 la Resistencia saboteó el túnel. Para el 22 de ese mes las fuerzas aliadas encontrarían en él una fosa común con 16 miembros de las Resistencia. Hoy la línea Verdún-Metz pasa por un túnel paralelo al anterior.


Filmografía:

"La vie et rien d'autre" - 1989
Philippe Noiret, Sabine Azéma
Dir: Bertrand Tavernier


Lectura Complementaria:

DETRÁS DE LAS PAREDES: La tragedia alemana del fuerte Douaumont

1 comentario:

Julio Jaime dijo...

Como siempre, historias muy interesantes. Felicitaciones.