En algún momento de su historia como estado Israel perdió el rumbo original. Tal vez fue en la época de Nixon, durante los pactos en la guerra de Yom-Kippur de 1973, en un momento muy delicado, donde ante el avance egipcio en el Sinaí se temió una derrota que en parte lo fue.
En esa guerra los arsenales se consumieron rápido. Buques de Israel partían del puerto de Norfolk con aviones A4 y Phantom en servicio en la U.S.A.F, a los que le pintarían la estrella de David encima de la escarapela de EEUU.
Hasta esos años Israel se había abastecido de aviones franceses, los que eran pagados con colectas, a precios sin favoritismos. Los créditos que fluyeron de EEUU para armamento más la asociación estratégica militar que siguió con los años venideros hacen bastante entendible que hoy estén sumergidos en el neoliberalismo, con gobiernos de derecha y el aparato militar por encima de todos. Se contagiaron de doctrina imperial.
Hoy están aquellos israelíes que se manifiestan en las calles, entre otras cosas, por la falta de viviendas:
También están aquellos que el gobierno les demuele sus casas por ser asentamientos ilegales en territorios palestino, el mismo gobierno que construye miles de casas ilegales en territorio palestino, fronteras de 1967 afuera:
Las reacciones extremistas resultaron en ataques contra una mezquita y contra vehículos del IDF. La prensa se refiere como "grupos marginales" y sí, es cierto, el neoliberalismo hace eso, crea grupos marginales, miles de ellos.
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