jueves, 8 de julio de 2010

Ser kirchnerista es como fumar faso

Para los tiempos del conflicto con los sojeros, los medios, principalmente Clarín y La Nación, lograron hacernos sentir como parias. Cada uno de nosotros sentía que estaba sólo en su apoyo al gobierno. Vecinos, parientes, amigos, la sensación era que no se podía hablar con nadie acerca de nuestra posición.
Al comenzar a ganar la calle, cuando se dio ese octubre de la Ley de Medios, luego con 6-7-8, la convocatorias de 6-7-8 Facebook en Plaza de Mayo y el Obelisco, la marcha del 24 de marzo, fuimos reconociendo a extraños como propios. Nos dimos cuenta que no éramos pocos y estábamos convencidos.
Como dos que fuman marihuana, cuando se encuentran dos personas que apoyan al gobierno y no conocen la posición del otro, primero se tiran pequeños signos, que para el del palo son inequívocos. Cuando se concluye que los dos piensan lo mismo, enseguida brota la sonrisa cómplice, surgen las expresiones de entendimiento del saberse iguales.
Y entonces nace una amistad que no será con el vecino, el pariente o el amigo, será con un extraño devenido en cumpa.
El kirchnerismo es un camino de ida.

1 comentario:

Lic. Baleno dijo...

Estan hablando del fasoooooo