MIENTRAS SE LE SURTÍA AL GORILA, BUNGE EVADÍA

Los sojeros fueron mucho más allá que D'Elía. Todo estaba para que terminemos todos a los tiros. Mientras tantos, las grandes ausentes en la discusión del 2008, la cerealeras, las que se llevan la parte del león, evadían los impuestos, que eran justamente el motivo de discusión. Los productores sojeros también evaden a lo caballo, por eso peleaban para que no les suban el único impuesto que no pueden evadir solitos, las retenciones, porque se las cobra su dios, la multinacional que les pone el precio a su trabajo. Nada sectorial, en este país evadir es fundacional, está en el ADN desde la colonia y el contrabando.

Recordemos todos los días de angustias que pasamos. Días extraños, de un Buenos Aires ahumado por el humo de un interior encendido. Bronca, odio, insultos. Mientras tanto Bunge y calculo que el 99,9% de las restantes cerealeras, como el Lysoform,  se metían en el bolsillo un dinero que estuvo a punto de mancharse de sangre argentina, sin ser expuestos en ese momento para que la discusión tuviera todas las patas que debía tener. ¡A la cárcel por omisión!