martes, 8 de noviembre de 2011

El "Método Libia" y la desconcertante dualidad de Irán

1 comentario:

Juan Salinas dijo...

Irán y Gadafi nunca se llevaron bien, entre otras cosas porque fueron, dentro del Islam, modos radicalmente distintos de entender el Islam. Para los iraníes, Gadafi era un ateo sino un hereje, y para Gadafi (que era un beduino italianizado y una especie de sufí hedonista) los ayatolás eran unos fanáticos. Los chíitas libios estuvieron desde siempre contra el "satánico" Gadafi. Lo demás es realpolitik. A Irán le conviene mucho que el nuevo desgobierno "democrático" de la Cirenaica le piuda ayuda, entre otras cosas porque eso le quita espacio a los halcones de EE.UU. para ensayar un ataque sorpresa. Por lo pronto éste no parece que vaya a producirse mientras el "gobierno libio" esté en Teherán.
Algo es algo.