El jueves pasado después de las 21 hs. un temporal de viento y granizo dejó a Progreso como una zona de guerra. Hizo perder las cosechas de pequeños y medianos productores y dejó sin trabajo a quienes dependían de ella. Rompió vidros de casas y escuelas y parabrisas de los vehículos que habían quedado a la intemperie.
Un árbol caído cortó cables de telefonía y la zona quedó sin luz. Hubo pánico y terror en los vecinos que sentían como si sus casas se fueran a derrumbar, muchos se escondían con sus niños debajo de las camas. Algunas fotos del diario El Observador ilustran los daños:
No hay comentarios:
Publicar un comentario