Que los hizo Clarín, que los hizo algún K, que esto no, que así no, que no hay que personalizar, que está mal, que no están firmados, que los periodistas esto, que los periodistas el otro.
¿De qué carajo estamos hablando?
Una marcha masiva, ignorada, ninguneada, omitida y nos ponemos delicaditos con un afiche. Yo me quedo con Banchero al palo, con el golpeteo de todas las mesas rompiéndonos las manos, al grito de : "Clarín, Magnetto, devuelvan a los nietos".
Lo haya hecho quien lo haya hecho y para qué, ese afiche podría haber sido la entrada diaria de cualquier blog que apoya al gobierno. Lo hacemos todos los días. Agarramos a cualquiera de los del afiche, los fotoshopeamos, los dejamos en ridículo, cantamos nuestras verdades y la bronca, los puteamos y le ponemos cuerpo de alguna foto de un gorila bajada de internet.
Y eso en la mínima, en la máxima los mandamos a la putas madres que los reparieron y volcamos en los blogs imágenes muy cercanas a la apología del delito.
La cuestión está ahí. Son cercanas como cercana es la legítima defensa al homicidio. Hoy es legítima defensa del pueblo poner a Clarín en su lugar. A Clarín y a todos los que anteponen el sueldo que les paga Clarín al bienestar de ese pueblo, mintiéndonos en la cara, omitiendo, ocultando. Y esos tipos que vemos en la pantalla son los dueños de todas las caras del afiche. Más los que no están, una troja importante de mercenarios, muchos a los que no le conocemos las caras. Como la de Magnetto hasta hace poco o la de Aranda, no tan difundida.
Que se la banquen. No hay lástima que valga.
1 comentario:
Es notable, pero hoy escuché algunos comentarios críticos del famoso afiche con las fotos de los periodistas canallas. Y la principal crítica se refería al anonimato del autor.
Y yo me pregunté lo mismo que Che Genetic en su blog: ¿ahora tenemos que respetar reglas de buena conducta y caballerosidad con estos tipos que mienten, desinforman y hacen cualquier cosa que les manden sus patrones? ¿Qué más da quién es el autor? Lo importante es que ese afiche dice lo que pensamos todos los que estábamos en la marcha.
Dice lo que pensamos los que estamos hartos de la mentira permanente, del ninguneo de las obras del Gobierno que nos gusta aplaudir, de la distorsión y la falsedad permanentes. Personalmente no pienso pedirle disculpas a ninguno de esos supuestos caballeros de la prensa.
Publicar un comentario